Mejoras para adaptar nuestra ducha
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Te vamos a enseñar las mejoras mas importantes a la hora de adaptar nuestra ducha para el uso de personas con algún tipo de discapacidad.
La limitación en la movilidad que las personas ven con el paso de tiempo o por algún tipo de lesión o patología puede dificultarnos nuestra vida diaria. Es importantísimo que mantengamos nuestra autonomía en la vida diaria sobre todo a la hora de realizar nuestra higiene personal. Y especialmente en este lugar es donde debemos tener más cuidado por tratarse de ambientes húmedos y resbaladizos.
Baldosas antideslizantes.
Una de las mejores y más rápidas opciones a la hora de mejorar la seguridad de nuestra ducha es colocar los famosos peces antideslizantes o baldosas antideslizantes. Estas hay que posicionarlas de forma que el agua tampoco pueda quedarse encima de ellas recordar que nos tienen que ayudar. De este modo procederemos a colocarlas en superficies con al menos un 2% de inclinación como es los laterales del plato de ducha.
Sillas y banquetes para la ducha.
Otra de las opciones más recomendadas también es el uso de sillas o banquetes para la ducha. Estos nos permitirán apoyarnos para llegar a las zonas inferiores del cuerpo y aportándonos la estabilidad que necesitamos. Además podemos utilizarlas para sentarnos cuando nos sintamos fatigados. También existen modelos de asientos que van directamente atornillados a la pared para cuando no disponemos de mucho espacio por ejemplo en el plato de ducha y que nos pueda aportar ese espacio de descanso.
Barras de sujeción y apoyos.
También podemos servirnos de barras de sujeción que nos ayudaran a mantener el equilibrio cuando necesitemos salir del baño. Estas barras pueden ser colocadas muy fácilmente y nos aportaran una ayuda extra tanto para entrar y salir como para poder colocar en ellas algo que necesitemos como por ejemplo una toalla.